El Señorío sobre la villa fue ejercido por los Priores Sanjuanistas, que designaban alcaldes ordinarios. La situación se mantuvo hasta el siglo XIX. Tuvo su iglesia dedicada a los Santos Justo y Pastor; en su honor continúan celebrándose las fiestas patronales el 6 de agosto. La parroquia está actualmente dedicada a la Asunción, cuya imagen preside el culto desde el magnífico retablo mayor plateresco del siglo XVI.
En ella se abre una capilla barroca dedicada a Nuestra Señora de la Peña, patrona de la Villa; para ella construyó Domingo de Alzo, cantero guipuzcoano, nueva capilla por los años 1596-97, y Bernal de Gabadi, escultor guipuzcoano afincado en Tudela, las “Andas de Nuestra Señora de la Peña”, doradas y pintadas por el maestro Juan de Lumbier. Gabadi labró igualmente el nuevo retablo para la imagen, que durante el siglo XVII acostumbraban a sacar en la procesión del Corpus.